lunes, 29 de septiembre de 2014

Ser feliz no es gratis

Hola, con esta frase tan profunda retomamos el blog. Hace mucho que este blog se ha convertido en una no-obligación, simplemente volvemos a él cuando tenemos algo que decir o compartir. Al comienzo de la "era de los blogs de moda" decidimos Laura y yo (Sara) crear un lugar donde quedase registrado nuestras incontables horas de charlas telefónicas, pensamientos, gustos... Han pasado muchas cosas y es obvio que no le prestamos el tiempo suficiente que deberíamos, pero no tenemos más pretensiones. Lo que sí teníamos claro es que no queríamos convertir el blog en lo que otros muchos a los que en un principio admirábamos se han convertido.
A nosotras nos gusta la moda, SI. Pero también nos gusta hacer muchas otras cosas cotidianas. Y en todas estas cosas, nos gusta poner toda la ilusión y energía posible.
El título de la entrada es una frase que repite muchas veces Laura y nos ayuda a superar los momentos no tan buenos. Ambas sabemos que nuestra felicidad la construímos nosotros mismos, y yo desde que llegué de mi viaje a India y Nepal soy mucho más consciente de esto (prepararé un post para intentar expresar este super viaje)
Ahora, comienza un nuevo curso escolar y como cada año, tenemos nuevos proyectos personales.  De momento, os quería recomendar la Lanaterapia.
Es muy sencillo, hay innumerables tutoriales en internet y tiene muchos beneficios.

 
El año pasado me dio por los cuellos de lana (tengo de todos los colores!) y para las impaciente como yo, os puedo asegurar que en poco tiempo consigues una bufanda preciosiiiisima.
 

Este año daré un paso más, y me he propuesto hacer ponchos, mitones...






Ah! Os quería recomendar la línea de productos para el cabello Macadamia natural oil, compuestos por una mezcla de aceites terapéuticos, apto para todo tipo de cabellos, que realmente lo repara.


Por último, mi recomedación es que busques tu motivo para ser feliz o búscalo donde mejor te sientas. Porque ser feliz no es gratis pero su valor es incalculable.
Saludos,
Sara.